Deformación Profesional
La memoria de la gente es corta, pero su rencor puede durar mucho tiempo. Así funciona el corazón humano. No es de extrañar entonces que rencillas absurdas perduren en el tiempo a través de las generaciones, sobreviviendo a aquellos que las originaron para atar y dirigir las vidas de sus descendientes por un camino de odio y rencor cuyas causas acaban siendo olvidadas. Pero el rencor permanece, amigos. Es lo maravilloso de los sentimientos. El amor nunca muere, el amor es eterno, sí, vale, puede ser, pero no es el único. ¿Por qué iba a serlo? De hecho, el amor, la confianza, la alegría, todas esas cosas tan bonitas, pueden venirse abajo y romperse con relativa facilidad. Pero el rencor, el odio, el miedo o la inseguridad son mucho más persistentes e intensos. Y por tanto, más abundantes. Estos sentimientos “negativos” son como malas hierbas, plantas que pueden crecer y desarrollarse en cualquier medio, sin ninguna necesidad específica de ninguna clase. Basta con cualquier campo regado ...